REFLEXION

Al empezar este ciclo, la verdad no tenía muchas ganas de cursar la materia de Mercadotecnia. Para ser sincera, mis experiencias pasadas con el aprendizaje por competencias no habían sido muy buenas, así que no esperaba mucho. Ya conocía algunos conceptos, pero los veía solo como cosas “interesantes”, sin pensar que en verdad fueran útiles para mi carrera o para mi vida.

Pero conforme avanzaron las clases, mi forma de ver todo esto cambió por completo. Lo que antes me parecía complicado o aburrido, se volvió algo que realmente me ayudó a crecer. Me sorprendí haciendo cosas que antes ni me imaginaba como en el caso de la campaña.

Aprendí muchas cosas que no solo aplican al marketing, sino también a mi día a día: cómo comunicarme mejor, cómo trabajar en equipo, cómo manejar mis emociones y tener autocontrol, entre otras. También entendí lo importante que es la organización, especialmente cuando trabajamos por roles en los equipos. Además, aprendí algo que me va a servir toda la carrera: cómo usar las normas APA.

Todo lo aprendido en esta materia me lo llevo conmigo, y me comprometo a aplicarlo primero en lo personal. Me di cuenta de que, para ser buena profesional, primero tengo que trabajar en mí misma. Voy a enfocarme en ser más organizada y más segura de mí misma. Quiero dejar atrás el miedo de intentar cosas nuevas y seguir con la mente abierta.

Este ciclo me ayudó a ver que el marketing no solo se trata de vender, sino de conectar con las personas. Y para poder lograr eso, primero tengo que aprender a conectar conmigo misma.